Marie Curie (1867–1934), nacida Maria Skłodowska en Varsovia (Polonia), fue una científica pionera que desafió las barreras de género y revolucionó la física y la química. Tras mudarse a París para estudiar, se convirtió en la primera mujer en ganar un Premio Nobel y la única persona en ganarlo en dos disciplinas distintas (Física en 1903 y Química en 1911). Murió por anemia aplásica, probablemente causada por su exposición prolongada a la radiación.
Principales logros:
- Descubrimientos revolucionarios:
- Aisló el radio y el polonio (nombrado así en honor a su Polonia natal), elementos que abrieron la puerta al estudio de la radiactividad.
- Acuñó el término “radiactividad”, sentando las bases de la física nuclear moderna.
- Contribuciones humanitarias:
- Durante la Primera Guerra Mundial, diseñó unidades móviles de rayos X (“pequeñas Curies”) para salvar vidas en el frente.
- Legado académico:
- Primera mujer en doctorarse en la Universidad de París y en ser profesora allí.
- Fundó los Institutos Curie en París y Varsovia, centros líderes en investigación oncológica.
5 datos curiosos que quizá no sabías:
- Llevaba radiación en el bolsillo: Guardaba viales de radio en su delantal y los mostraba como “luces mágicas”. ¡Incluso dormía con ellos!
- Sus notas siguen siendo peligrosas: Sus cuadernos y pertenencias están tan contaminados por radiación que se guardan en cajas de plomo. ¡Para consultarlos, hay que firmar un consentimiento y usar traje protector!
- Una familia de Nobel: Su hija Irène Joliot-Curie también ganó el Nobel de Química (1935), y su yerno Frédéric Joliot fue otro laureado.
- Casi la excluyen de su propio Nobel: El comité quería premiar solo a su esposo Pierre y a Henri Becquerel, pero Pierre amenazó con rechazarlo si no la incluían.
- Su Nobel fue fundido por la patria: Durante la Segunda Guerra Mundial, donó su medalla para subastarla y financiar la resistencia polaca.
✨ Conclusión:
Marie Curie no solo iluminó los secretos del átomo, sino que brilló como símbolo de tenacidad y altruismo. Su vida nos enseña que la ciencia no tiene género ni fronteras, solo pasión y preguntas por responder. ¿Cuántas vidas habrán salvado sus descubrimientos? 💡
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